Poesía. La bestia interna

 Por: Centro Literario Istak Axolotl



El aire se enviciaba a junto él
y en sus ojos se notaba la desesperación
fija en la hoja blanca
de su solitaria alma.

No va a soportarlo más,
su mente está afuera, divirtiéndose
en el aire y con la hojas meciéndose.
Nada le impide soñar.

Sin embargo, su cuerpo permanecía amarrado
en un frío asiento.
Como una bestia atado.

El lobo en su interior deseaba saltar
a una presa asir
y entre sus blancos y afilados dientes
no dejarla correr.

¡Basta! –gritaba la voz en su interior y
confundido por esta ilusión
su alma se dividió.


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